
El gobierno socialista balear de Francina Armengol, apoyado por Podemos y Mes, está actuando como una de esas comunidades marginadas de Brasil atrapadas en el círculo vicioso de la prostitución infantil, violencia y drogas ocurrido en sus centros de acogida públicos en Mallorca. Negando la comisión solicitada por Ciudadanos y Vox alguien podría pensar que busca la ocultación y encubrimiento de aquellos que mantienen relaciones sexuales con niñas
Y es que ocultación es, según la Real Academia del Lenguaje, “mantener en secreto para prevenir o evitar la divulgación de algún asunto de interés general o para ocultar la identidad de alguien”. En este caso la pregunta sería ¿Es así? O mejor dicho ¿De quien?.
Todo empezó con la noticia de una violación grupal el pasado 24 de diciembre en el barrio de Corea, en Palma. La víctima, de 13 años, fue confinada por un grupo de seis hombres y otra mujer, todos ya detenidos, en un piso y sometida a prácticas sexuales sin su consentimiento.
La noticia y la investigación abierta por la Policía Nacional obligó al IMAS (Instituto Mallorquín de Servicios Sociales), a reconocer que al menos 16 menores bajo su responsabilidad habían sido prostituidas por redes criminales. Pero siendo esto malo, lo peor es que fuentes internas de los centros de acogida denunciaron en los medios la ausencia de “protocolos fiables” para poner fin al problema, la carencia de vigilancia y seguimiento de los menores y la dejadez generalizada de la administración.
Dejadez, terrible palabra que suena peor al asociarla con prostitución infantil. Dejadez de un gobierno que se dice socialista. Dejadez de sus socios populistas que tanto claman por los derechos de las mujeres. Dejadez por parte de quien dice ser el promotor del feminismo en España… ¿Verdad vicepresidenta?. Dejadez inmoral al negar una comisión de investigación sobre el IMAS. ¿Dejadez u ocultación?
Y mientras, los niños a la espera de que una vez tras otra abusen de ellos, sin que los que han de cuidar por su protección y bienestar hagan lo mas mínimo para ello. Progresismo bocazas y panfletario, incapaz o cómplice pero encubridor al fin y al cabo, y todo por dejadez.
Según las estadísticas oficiales una de cada tres personas refugiadas es un niño o una niña. Hay críos refugiados que salen de sus países solos, hacen todo el camino solos y llegan a nuestro país solos. Sin que nadie cuide de ellos o les proteja, han vivido situaciones terribles que les dejan en una posición terriblemente vulnerable y sin protección alguna.
Pero por lo visto en Baleares hasta el momento ese horror no acaba cuando llegan a destino, apenas empieza. España no está, ni mucho menos, cumpliendo con sus obligaciones legales respecto a estos niños. Es mas tal y como las investigaciones de la policía ponen de manifiesto se está vulnerando sus derechos tanto por acción como por omisión.
Como cualquier niño indefenso y asustado viajando solo en condiciones precarias y temiendo a todo el mundo por el mal que le pudiera causar, estos niños se enfrentan a la acción de los indeseables en su camino: desde la explotación, el abuso y la violencia, a la ausencia de educación o de cuidado, la prostitución y el trafico de drogas.
Sin embargo, el mayor mal de todos es el olvido y la invisibilidad a las que la sociedad y gobiernos como el Balear les someten, mientras abusan de ellos miserables sin escrúpulos, escoria del mundo.
Pero el mal continúa y nadie hace nada significativo. A finales del mes pasado se supo que PSOE y Podemos votaron en contra de dos intentos de investigar el IMAS, ante sendas peticiones presentadas por la diputada del grupo mixto Xelo Huertas y por Vox.
El problema se convirtió en cuestión de Estado cuando saltó la semana pasada al Congreso de los diputados en el que Pablo Iglesias, vicepresidente y pareja de la supuesta ministra de igualdad, tuvo la desfachatez de ladrar a la oposición aquello de “Que estemos hablando de niñas prostituidas en Baleares y ustedes se descojonen revela el nivel moral”.
Pero no Pablo, no se descojonaban de eso sino de ti, porque hay que tenerlos cuadrados para corroborar con tu intervención lo ocurrido en Baleares, sobre todo recordando la respuesta dada por el presidente del IMAS a la petición de Vox, concretamente dijo que era una “pérdida de tiempo”, contestación que tuvo lugar 12 días antes de la violación grupal de la niña de 13 años. Sinvergüenza uno, miserable el otro.
En su denuncia Vox argumenta que “el PSOE ha intentado ocultar los casos de prostitución de menores tutelados del IMAS”, añadiendo que: “En cualquier país normal, tendrían que dimitir de arriba abajo”. Sin palabras
En un país normal quizás, en uno regido por los nuevos cauces del socialismo y populismo progre interesados mas en parecer que en ser, simplemente no.
No deja de ser curioso, cuando no sospechoso, el escaso interés del PSOE por investigar estos hechos y que se sepa la verdad. Es extraño si tenemos en cuenta que estos casos de prostitución infantil se han venido produciendo durante su mandato en Baleares y en Mallorca, por lo que no solamente dejan en entredicho a los centros de acogida de los menores, sino también a los políticos que eran responsables de los mismos.
Pues eso