Que el tiempo político que corre en España sopla con vértigo es algo que ya sabemos. Este simulacro de gobierno se ha declarado independiente de la opinión general de los ciudadanos. Ya no nos hacen caso y es más, pasan de nosotros como si fuéramos “chelis” de barrio a los que hay que obviar y no prestar la más mínima atención.
Y es que a la hora de ser macarras, a este gobierno no le gana nadie. Y no es solo porque la ministra portavoz haya hecho de la sala de prensa de Moncloa algo parecido a un puesto de pescado en un mercado de abastos, que también, pero es que de chulos es dar indultos sin ton ni son y sin respetar ni a la opinión publica mayoritaria, ni a la justicia, ni a los propios militantes socialistas.
A estos últimos además los ningunea. Sánchez y sus palmeros han pasado hasta de Rodríguez Ibarra, que sugirió un referéndum entre los militantes para conocer la postura de la base socialista sobre los indultos, pues bien los ha negado y les ha dedicado una pedorreta.
Para ser mas precisos fue la portavoz Montero, la Chiki, quien en una rueda de prensa mientras defendía que la mayoría del PSOE comparte la hoja de ruta a favor de la «concordia» y la «convivencia» que había marcado el presidente se atrevió a decir: “El presidente no se esconde detrás de nada y bajo nada.Lo que no es ninguna solución es “taparse la cara como los monos de Gibraltar”.
No sabía yo que los monos de Gibraltar tuvieran esa facultad de que cuando algo no está bien se tapan la cara, pero por lo que se ve la ministra ha gastado largas horas de observación de las costumbres de estos primates a lo Jane Goodall”, solo así se entiende que nos trate como a estos macacos.
Los monos de Gibraltar, macaco de Berbería o mona rabona (no me refiero a usted ministra) proceden del norte de África, aunque para evitar una peligrosa confusión aclararé que no son marroquíes. A ver si ahora vamos a tener un problema más con el Rey Moro a costa de otra metedura de pata de este gobierno tan “enterao”.
Pero más allá de todo esto, los monos de Gibraltar al contrario de este gobierno que nos toca sufrir, no se tapan la cara con los problemas. Aunque cualquiera que haya visitado el peñón sabe que esos macacos son unos chorizos “de tomo y lomo” que te birlan todo cuando menos te lo esperas, vamos como este gobierno. Así que la ministra tenía razón en algo: los monos de Gibraltar actúan si, pero como ellos.
Los indultos de los independentistas sediciosos son un robo a la democracia, una aberración institucional y un pésimo ejemplo para la sociedad. Una vez producidos España deberá poner en la balanza lo poco que le importa a su presidente y a su gobierno la opinión de ciudadanos y juristas y decidir si eso es lo que necesita este país.
A Sánchez lo que digamos el resto de españoles le importa un bledo, el solo necesita que la parte que, sorprendentemente, aún respeta el socialismo le vote, y es que puede contar con la certeza de que el resto de españoles le “botaremos” seguro.
Indultos y monos de Gibraltar son los términos en los que se maneja y prodiga el sanchismo reinante, o perdón se manejaba hasta que hemos descubierto que además estos sinvergüenzas andan de “citas discretas”.
Y es que según me he enterado gracias a vozpopuli.com los diputados de Bildu piden reuniones discretas en la cárcel para supervisar el futuro de los presos etarras.
Según leo “Mediante una carta, tres diputados de Bildu solicitan entrevistarse con el director de la cárcel de Basauri para abordar las novedades resultantes de la transferencia de prisiones al País Vasco”
De traca vamos.
Ahora resulta que los herederos de los que alcanzaban las portadas de los periódicos a base de tiros en la nuca y asesinatos quieren citas discretas para tratar “ese asuntillo” de cómo proteger y abrir las prisiones a sus mayores encerrados por asesinos.
Y lo peor es que se lo permitirán. Sánchez ya ha acercado a los etarras a su tierra y transferido las competencias penitenciarias al gobierno vasco de PNV y no dude lector que en nada estos harán caso a Bildu y entregaran a los presos etarras a sus cachorros.
Pero no olvidemos que ETA provocó el terror en España durante cincuenta años. Sus coches-bomba, sus secuestros o sus tiros en la nuca provocaron más de 850 víctimas mortales.
Un reguero de sangre al que se unen varios miles de heridos y mutilados. De forma paralela, la extorsión, las amenazas de muerte y la persecución al que pensaba diferente provocó que miles de vascos y navarros tuvieran que abandonar su tierra, no lo olvidemos nunca.
Monos, indultos injustos y citas discretas con herederos de asesinos, de esto está hecha la política del gobierno hoy en día. Reparta lector estos conceptos a quien quiera del sanchismo reinante y verá que encajan perfectamente en cualquiera.
En especial los monos, aunque sean de Gibraltar.
Pues eso